miércoles, 27 de mayo de 2009

EL TIGRILLO

EL TIGRILLO:
Cuando Antonio José Bolíbar Proaño llego a la selva amazónica tenia 20 años de edad; estaba casado con su mujer Dolores Encarnación Del Santísimo Sacramento Estupiñán Otavalo. También llego junto con él su hermano Catilo, un hombre criado en el campo, que según su hermano mayor Antonio José Bolívar Proaño le faltaban varios jugadores. Su esposa murió al poco tiempo de haber llegado a la selva, por causa de fiebres rápidas y fulminantes. Por esta razón vivía con su hermano Catilo en una precaria choza de caña. Cada año el doctor Gomulka visitaba el pequeño pueblo del Idilio, donde vivía José Antonio Bolíbar Proaño junto con su hermano Catilo y una diminuta población incluyendo en ella al alcalde, apodado como la babosa. Hoy era un día especial en el Idilio porque lo visitaba el doctor Gomulka, el se encargaba de revisar en que estado se encontraba la población, si estaban enfermos, etc. Cada vez que un paciente se quejaba por el dolor que sentía cuando era revisado le decía ya se que te duele cojudo pero de quien es la culpa mía no del gobierno métetelo bien en la cabeza. Pero ese día era un día especial y no solo porque lo visitaba el doctor Gomulka sino porque de repente apareció una canoa en la que venían abordo dos indios shuar que traían el cuerpo de un gringo que avían encontrado a horillas del rió a dos días del Idilio. Luego de largas investigaciones y gracias a Antonio José Bolíbar Proaño se descubrió que lo que le avía provocado la muerte al gringo había sido las garras de un tigrillo y no un machetazo de los shuar como decía el alcalde. En su bolso encontraron pieles de tigrillos jueves que fueron acecinados con escopeta porque tenían dos perforaciones en su piel. El alcalde preocupado por la furia del tigrillo se unió junto a Antonio José bolibar Proaño, su hermano, y al doctor Gomulka para internarse en la selva en busca del tan temido triguillo. Luego de varios días encontraron un lugar que según unas huellas podría haber estado el tigrillo y unos metros mas adelante definitivamente estaba el tigrillo. El viejo y el triguillo se enfrentaron y comenzó el apasionado combarte el alcalde se metió para ayudar a Antonio José Bolibar Proaño y justo en ese momento Catilo tomo la escopeta y se escuchó un disparo...(continuará) Basado en un viejo que leía novelas de amor. Nahuel, Piqueras.

2 comentarios:

Blog de 4º dijo...

¡Nahuel, casi me matás de un susto!
Te censuré el relato, que venía excelente, porque no podemos tratar esa parte de la historia hasta que todo el curso lea la novela...
Dejalo así hasta nuevo aviso. Igual, el trabajo y la imagen están muy logradas. Saludos, el profe.

Blog de 4º dijo...

FRAN: pero tomé ideas de la novela o sea no la copié y a el final le cambié totalmente el sentido nada que ver con la novela